EL ORIGEN DEL MERCADILLO "DE LOS GITANOS" Y LA PRIMERA FERIA DE GANADO DE JEREZ.
Los privilegios que los Monarcas, desde Alfonso X el Sabio hasta Carlos III, habían concedido a Jerez de tener un mercado semanal, los lunes, y dos ferias anuales, abril y agosto, estas tenían carácter general por lo que se refiere a los productos objetos del mercado y de las ferias.
Hasta el año 1860 no se plantea en Jerez el propósito de tener su feria especialmente ganadera.
En Cabildo de 22 de marzo de 1860, se presentó un escrito firmado por don Francisco García Pérez, don José María Romero, don Juan López, don Juan Frutos, don Domingo G. Quijano y don José Guerrero.
Comenzaban excusándose de las molestias que pudiera ocasionar y de las interpretaciones a que pudiera dar objeto, estableciendo de una manera precisa que el único propósito que guiaba a los peticionarios era el bien de la ciudad.
Se pedía el establecimiento de una feria anual de ganado en Jerez y se justificaba la petición con las razones siguientes: las ferias son fuentes de riqueza. El termino municipal de Jerez es, desde el punto de vista agrícola, "el más importante, tal vez, de toda España", Jerez no tiene Feria de Ganados. Las industrias jerezanas son principalmente agrícolas. Jerez está unida por el ferrocarril a otras poblaciones que son tanto o más que esta. Por todas estas razones debe de tener su feria propia de ganados.
Reconocían los peticionarios que las dificultades eran grandes, que eran muchos los problemas a resolver, pero estimaban que ninguno de ellos eran insuperables.
El esquema de la gestión lo establecían así:
Concesión de la feria ganadera.
Emplazamiento para el mercado.
Época mejor para celebrarla.
Respecto a la época más apropiada se señala la de septiembre, en vez de agosto, en los días 9, 10 y 11.
Por lo que se refiere al lugar, estimaban que la ciudad disponía de un emplazamiento ideal que tenia como eje la linea que va desde la fuente de la Alcubilla a la de San Telmo y los alrededores de Cerro Fruto. Consideraban que este emplazamiento era solamente el mejor, sino el único.
Dado cuenta del escrito en la sesión municipal se acordó el nombramiento de una comisión especial. Un mes después emite ésta (don Gregorio Jiménez de Cisneros, don José María Izquierdo, don Francisco Díaz de la Campra), su informe favorable señalando el trámite a seguir para la concesión de la Feria, mostrándose de acuerdo con el lugar y las fechas propuestas.
Con el fin de hacer ya un estudio a fondo de los diversos problemas que se derivaban del propósito, se acordó el nombramiento de una comisión de concejales y labradores que, ala vista de relación de propietarios de los terrenos hicieran gestiones para lograr de ellos la autorización correspondiente para su utilización durante los días de Feria. (Tomas García Figuras).
Los privilegios que los Monarcas, desde Alfonso X el Sabio hasta Carlos III, habían concedido a Jerez de tener un mercado semanal, los lunes, y dos ferias anuales, abril y agosto, estas tenían carácter general por lo que se refiere a los productos objetos del mercado y de las ferias.
Hasta el año 1860 no se plantea en Jerez el propósito de tener su feria especialmente ganadera.
En Cabildo de 22 de marzo de 1860, se presentó un escrito firmado por don Francisco García Pérez, don José María Romero, don Juan López, don Juan Frutos, don Domingo G. Quijano y don José Guerrero.
Comenzaban excusándose de las molestias que pudiera ocasionar y de las interpretaciones a que pudiera dar objeto, estableciendo de una manera precisa que el único propósito que guiaba a los peticionarios era el bien de la ciudad.
Se pedía el establecimiento de una feria anual de ganado en Jerez y se justificaba la petición con las razones siguientes: las ferias son fuentes de riqueza. El termino municipal de Jerez es, desde el punto de vista agrícola, "el más importante, tal vez, de toda España", Jerez no tiene Feria de Ganados. Las industrias jerezanas son principalmente agrícolas. Jerez está unida por el ferrocarril a otras poblaciones que son tanto o más que esta. Por todas estas razones debe de tener su feria propia de ganados.
Reconocían los peticionarios que las dificultades eran grandes, que eran muchos los problemas a resolver, pero estimaban que ninguno de ellos eran insuperables.
El esquema de la gestión lo establecían así:
Concesión de la feria ganadera.
Emplazamiento para el mercado.
Época mejor para celebrarla.
Respecto a la época más apropiada se señala la de septiembre, en vez de agosto, en los días 9, 10 y 11.
Por lo que se refiere al lugar, estimaban que la ciudad disponía de un emplazamiento ideal que tenia como eje la linea que va desde la fuente de la Alcubilla a la de San Telmo y los alrededores de Cerro Fruto. Consideraban que este emplazamiento era solamente el mejor, sino el único.
Dado cuenta del escrito en la sesión municipal se acordó el nombramiento de una comisión especial. Un mes después emite ésta (don Gregorio Jiménez de Cisneros, don José María Izquierdo, don Francisco Díaz de la Campra), su informe favorable señalando el trámite a seguir para la concesión de la Feria, mostrándose de acuerdo con el lugar y las fechas propuestas.
Con el fin de hacer ya un estudio a fondo de los diversos problemas que se derivaban del propósito, se acordó el nombramiento de una comisión de concejales y labradores que, ala vista de relación de propietarios de los terrenos hicieran gestiones para lograr de ellos la autorización correspondiente para su utilización durante los días de Feria. (Tomas García Figuras).
Comentarios
Publicar un comentario