EL INJERTO EN JEREZ; LA RAÍZ DEL VINO.

TRAS UNA COPA DE VINO DE JEREZ SE ESCONDE UNOS PROCESOS MUY MINUCIOSOS, DONDE SE DESTACA EL SISTEMA DE SOLERAS, ÚNICO EN EL MUNDO POR SU PROCESO, PERO DEBERÍAMOS SABER ALGO MÁS.

RECONOZCO QUE ESTA PUBLICACIÓN PUEDE RESULTAR EN PRINCIPIO POCO ATRACTIVA, PERO MERECE SER CONOCIDA. 


El injerto en Jerez

El injerto se efectúa en Jerez poco después de la plantación. Si ésta ha concluido en el mes de enero, durante los que siguen se intenta mantener en el mejor estado posible el terreno, limpio de hierbas, bien mullido, cerrado y liso cuando empieza el calor del verano con el fin de que el barbado se desarrolle lo máximo posible.




El momento del injerto debe ser elegido de modo que exista una prudente circulación de savia en las plantas. Ni el reposo absoluto, ni la máxima actividad convienen a la injertación. Por ello, el final del verano (agosto-septiembre), es época adecuada.

Si el barbado no se ha desarrollado mucho y el año ha sido seco, como las temperaturas son altas en agosto, se recomienda aporcar o cubrir las cepas un cierto tiempo antes de injertar, dejando fuera sus brotes, con el fin de proteger el tallo del patrón y mantenerlo verde. También se puede "destaluzar" la planta a injertar. Consiste en eliminar hojas de sus brotes unos días antes del injerto. Se elimina así la transpiración y el patrón permanece más tierno.



Descalzado de la cepa para el injerto en yema


Abriendo la cajuela


El injerto que en esta época se realiza en Jerez es el de yema, que es del tipo llamado escudete. Consiste en incrustar una yema con parte del sarmiento de Palomino en el costado del patrón, por debajo de la superficie del suelo.



                                                               Ejecución de la cajuela 



Para ello primero se desbraga o descubre el patrón hasta unos 15-20 cm de profundidad, luego se realiza en él con la navaja, una hendidura específica denominada "cajuela", donde se encaja posteriormente la yema de Palomino (u otra variedad), que se ha extraído también con navaja, de un sarmiento de esa variedad.

                                                      Extracción de la yema del sarmiento para su posterior injerto 


A continuación el injerto se liga con rafia, dejando libre la yema, y finalmente se a aportar la cepa para proteger la zona hasta el final del invierno siguiente.

Al igual que es necesario que el patrón esté tierno y tenga suficiente grosor para su injerto, es preciso que la yema provenga de un sarmiento ya agostado o maduro y se conserve con humedad.  


Extracción de la yema del sarmiento para su posterior injerto 


                Injerto en yema concluido



Protección del injerto en rafia




Espigas terminadas para su injerto




"LA VITICULTURA DEL JEREZ", Alberto García de Luján. 1997.


Para info completa, peponortizperez67@gmail.com.

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