EL JEREZANO PEDRO DE VERA, EL CONQUISTADOR DE LAS CANARIAS.
Pródigo ha sido Jerez en dar a la Patria, hombres valerosos, leales y de gran espíritu guerrero, como este que traemos hoy aquí recordando sus hazañas, figura que dio esplendor al reinado de los Reyes Católicos, añadiendo a la corona de Fernando e Isabel, unas perlas de riquísimo valor: Las Islas Canarias.
HÉROE DE LA RECONQUISTA
Pedro de Vera, nació en Jerez en el primer tercio del s.XV. Fueron sus padres García de Vera y Aldonza de Vargas. Si bien, escritores diversos lo hacen descender de la Casa de Hita y Buitrago, nuestro ilustre paisano no tiene otra relación de parentesco con la anterior, más que la de haberse casado su hermana María con el noble de aquel linaje, don Diego Gómez de Mendoza.
Pedro, se educó a la usanza de aquellos tiempos, manejando la espada en las lides y contiendas de la reconquista. Su arrojo y valor, le dieron pronto fama y ya desde muy joven fue conocido con el sobrenombre de "El Valeroso".
Entre sus muchas buenas cualidades, contaba con la de ser fiel y leal hasta la muerte. Se cuenta que una vez, encontrándose en la corte de Enrique IV, monarca de quien recibió algunos favores, oyó a cierto caballero navarro murmurar del rey.
Pedro de Vera, le arrojó su guante al murmurador, y apartándose ambos, lucharon hasta que el jerezano, después de una discusión, le infringió el oportuno castigo.
Después de muerto su contrario, le arrancó la lengua u la arrojó entre los caballeros manifestando que estaba dispuesto a hacer lo mismo con todo el que ofendiera a su monarca.
Tomó el jerezano parte activa en la conquista de Medina Sidonia, al servicio del Duque de Arcos, Marqués de Cádiz, en la cual, luchando contra el alcaide cuerpo a cuerpo, lo arrojó por el muro, muriendo despeñado.
Pero la verdadera gloria de Pedro de Vera, no llegó hasta el reinado de los Reyes Católicos.
Reyes Católicos
CONQUISTA DE LAS ISLAS CANARIAS
La reina Isabel, llevada por su deseo de "inducir e traer a todos los pueblos e los convertir a nuestra santa fe católica e los enseñar e doctar de buenas costumbres", organizó la conquista del archipiélago canario.
A tal efecto, salieron de el Puerto de Santa María, el 28 de mayo de 1478, tres navíos rumbo a las islas, mandando la expedición el general Juan Rejón, el alferez Alonso Jaime de Sotomayor, y el dean, Juan Bermudez.
Juan Rejón y Pedro de Vera
La conquista de las islas, por enemistades entre Bermúdez y Rejón, no se llevó a buen término, teniendo que intervenir los Reyes Católicos con energía para dar fin a este conflicto.
Sabedores los monarcas de las correrías de nuestro paisano Pedro de Vera por tierras de moros, le encomendaron a tan ilustre guerrero en 1483, la prosecución de la conquista de Canarias, dándole el titulo y cargo de gobernador y de capitán de aquellas islas una vez conseguida la total hispanización del archipiélago.
Por este gran servicio, los Reyes Católicos dieron a Pedro de Vera, el cargo de proveedor general de las armas reales, el cual desempeñó hasta que fue sustituido por su hijo don Diego.
Pedro de Vera, se retiro a su ciudad natal, como buen jerezano que se consideraba, muriendo hacia el año 1496, siendo enterrado en el convento de Santo Domingo, donde sus antecesores habían fundado enterramiento.
Pedro de Vera
Rodrigo de Molina
Pródigo ha sido Jerez en dar a la Patria, hombres valerosos, leales y de gran espíritu guerrero, como este que traemos hoy aquí recordando sus hazañas, figura que dio esplendor al reinado de los Reyes Católicos, añadiendo a la corona de Fernando e Isabel, unas perlas de riquísimo valor: Las Islas Canarias.
HÉROE DE LA RECONQUISTA
Pedro de Vera, nació en Jerez en el primer tercio del s.XV. Fueron sus padres García de Vera y Aldonza de Vargas. Si bien, escritores diversos lo hacen descender de la Casa de Hita y Buitrago, nuestro ilustre paisano no tiene otra relación de parentesco con la anterior, más que la de haberse casado su hermana María con el noble de aquel linaje, don Diego Gómez de Mendoza.
Pedro, se educó a la usanza de aquellos tiempos, manejando la espada en las lides y contiendas de la reconquista. Su arrojo y valor, le dieron pronto fama y ya desde muy joven fue conocido con el sobrenombre de "El Valeroso".
Entre sus muchas buenas cualidades, contaba con la de ser fiel y leal hasta la muerte. Se cuenta que una vez, encontrándose en la corte de Enrique IV, monarca de quien recibió algunos favores, oyó a cierto caballero navarro murmurar del rey.
Pedro de Vera, le arrojó su guante al murmurador, y apartándose ambos, lucharon hasta que el jerezano, después de una discusión, le infringió el oportuno castigo.
Después de muerto su contrario, le arrancó la lengua u la arrojó entre los caballeros manifestando que estaba dispuesto a hacer lo mismo con todo el que ofendiera a su monarca.
Tomó el jerezano parte activa en la conquista de Medina Sidonia, al servicio del Duque de Arcos, Marqués de Cádiz, en la cual, luchando contra el alcaide cuerpo a cuerpo, lo arrojó por el muro, muriendo despeñado.
Pero la verdadera gloria de Pedro de Vera, no llegó hasta el reinado de los Reyes Católicos.
Reyes Católicos
CONQUISTA DE LAS ISLAS CANARIAS
La reina Isabel, llevada por su deseo de "inducir e traer a todos los pueblos e los convertir a nuestra santa fe católica e los enseñar e doctar de buenas costumbres", organizó la conquista del archipiélago canario.
A tal efecto, salieron de el Puerto de Santa María, el 28 de mayo de 1478, tres navíos rumbo a las islas, mandando la expedición el general Juan Rejón, el alferez Alonso Jaime de Sotomayor, y el dean, Juan Bermudez.
Juan Rejón y Pedro de Vera
La conquista de las islas, por enemistades entre Bermúdez y Rejón, no se llevó a buen término, teniendo que intervenir los Reyes Católicos con energía para dar fin a este conflicto.
Sabedores los monarcas de las correrías de nuestro paisano Pedro de Vera por tierras de moros, le encomendaron a tan ilustre guerrero en 1483, la prosecución de la conquista de Canarias, dándole el titulo y cargo de gobernador y de capitán de aquellas islas una vez conseguida la total hispanización del archipiélago.
Por este gran servicio, los Reyes Católicos dieron a Pedro de Vera, el cargo de proveedor general de las armas reales, el cual desempeñó hasta que fue sustituido por su hijo don Diego.
Pedro de Vera, se retiro a su ciudad natal, como buen jerezano que se consideraba, muriendo hacia el año 1496, siendo enterrado en el convento de Santo Domingo, donde sus antecesores habían fundado enterramiento.
Pedro de Vera
Rodrigo de Molina
Fue un mentiroso, que envió a más de 200 canarios a la esclavitud con el pretexto de mandarlos a Tenerife. Afortunadamente, los canarios amotinados fueron desembarcados en Lanzarote. Por su mal labor en la conquista de Gran Canaria fue destituido de su cargo
ResponderEliminarHay que ver la historia en su contexto... si ud. Estuviera en el siglo XV y fuese su hijo, estaría muy orgullos@ de él, pues cumplía las órdenes de los reyes. Hoy, con nuestro criterio, comprendemos, pero... hemos dejado de hacerlo? (México, Perú, África...)
EliminarTambién los policías y médicos sólo cumplían órdenes haciendo la mierda que han hecho,multas inconstitucionales, a sabiendas, prevaricación, y los otros matando ancianos en los centros de mayores a base de quitarles la medicación, inyectando morfina y dejándolos morir de hambre, sólo mataron miles de ancianos y sólo seguían órdenes
EliminarUn mercenario asesino y esclavista, que simplemente llego a Canarias solo pensando en su beneficio propio así fuese a costa de aniquilar las gentes que allí vivian en paz . Nadie de quien sentirse orgulloso.
ResponderEliminarLe ruego revise el texto publicado. La naturaleza de sus actos no tiene justificación alguna, ni siquiera, en ese contexto histórico. No podemos 'blanquear' la historia por muy paisano que sea, incluso aunque 'fuera su padre', como usted dice. El genocidio cometido con los aborígenes canarios por Pedro de Vera no tiene disculpa ni posible justificación. Le agradecería contrastara con los cronistas de la época y las reseñas históricas sobre sus 'aportaciones' a la conquista de las islas. Un canario.
ResponderEliminarFue el más sanguinario asesino que fue a canarias a destruir y asesinar a cuantos se opusieran en su camino de avasallar la cultura y etnia de los canarios. Mató a miles de canarios de varias islas convirtiendo en mercenarios a los conquistados en una para seguir en la siguiente. Asesino mayor en canarias para vergüenza de la raza humana.orgullo sólo de genocidas. Engañó traicionó Mató masacró todo canario que pudo.Una mierda sanguinaria inhumana, un Hitler del siglo15
ResponderEliminarTodavía está el cinismo de ponerle en las palmas el nombre a una calle, manda huevos
ResponderEliminarComentarios que borran porque no quieren se sepa lo asesino que fue el vera genocida
ResponderEliminarEsto es peor que el PSOE, lo que no interesa lo tapan siempre que puedan, nada nuevo bajo el sol
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